“Es mejor ser feliz que tener razón” es un principio que aplican las personas sabias en su vida porque saben que sólo aquellos que carecen de personalidad, argumentos o nobleza se empecinan en tener razón para saciar su loca necesidad de quedar por encima del otro y colgarse todas las medallas sin excepción. Trasladado a la gestión de un ayuntamiento esta idea podría traducirse como “Es mejor ofrecer un buen servicio que tener razón” y, por desgracia, parece que no se encuentra entre los criterios que guían a nuestro equipo de gobierno en muchas de sus decisiones. De otra forma, no se entiende que ante la solicitud de ZB en el último pleno de que se revisara algo tan poco trascendente como las normas de acceso a la piscina exterior, para mejorar en lo posible el servicio, ni siquiera se tuvieran en cuenta las sugerencias que se hicieron.
La concejala de deportes planteó para este año un sistema de cupos de entradas para asociados y no asociados que probablemente pretende evitar que los asociados que no pagan entrada ocupen todas las plazas disponibles con antelación. Sin embargo, no se dieron cuenta de que reduciendo el nº de entradas para asociados se fomenta aún más que estos usuarios realicen reservas “por si acaso”. Debido a esto se han vivido situaciones kafkianas en las que los asociados que intentan acceder por la tarde se encuentran que su cupo está cubierto y aunque queden plazas libres para no asociados no pueden utilizarlas ni pagando la entrada, con el agravante de que muy probablemente algunas de esas plazas no se utilizarán al final del día, porque no todo el mundo está por pagar 4 € para las pocas horas de tarde que queden.
Algunas posibles sugerencias que se plantearon en el pleno y otras que se nos ocurren: recuperar las entradas de medio día (mañana y tarde) que estaban en vigor el año pasado y que funcionaron bien, liberar los cupos a partir de las 15:00 de la tarde para que puedan ser utilizadas indistintamente por asociados y no asociados a su llegada a la piscina, permitir que se puedan anular reservas en el día de forma que queden disponibles para otros usuarios…
Es también una lástima que el título de “Ciudad amiga de los niños” que ha otorgado recientemente UNICEF a nuestro municipio no haya servido para que el equipo de gobierno le eche un poco de imaginación para que las cuadrillas de amigos, formadas por asociados y no asociados, puedan acceder a la piscina exterior adquiriendo las entradas de forma autónoma en las instalaciones y en la misma zona COVID del césped.
Ahora, cuando las quejas de los usuarios arrecian, igual se plantean que más les hubiera valido atender a las sugerencias de la oposición. Pero el hecho de que hayamos llegado a finales de julio sin ningún cambio nos hace sospechar que no están en el camino de enmendar el error. De hecho, “de sabios es rectificar” y podrian haber revisado los datos de acceso y la satisfacción de los usuarios en los primeros días del verano para modificar las normas. Todo parece indicar que de nuevo lo prioritario para nuestro equipo de gobierno no es la calidad del servicio que se ofrece sino quién se cuelga la medalla, quién “tiene razón”.
(Foto:zallainfo)